Para muchas personas los videojuegos son un escape de la realidad y a veces son el dolor de cabeza de padres de familia. Sin embargo, son una herramienta divertida y sencilla para conectarse con otra gente, convirtiéndose naturalmente en el instrumento que te dará las destrezas necesarias para desarrollar diferentes habilidades sociales.

Al estar en contacto con los videojuegos, los jóvenes aumentan su creatividad y curiosidad sobre ellos que les da la posibilidad de obtener muchas habilidades para impulsar una carrera relacionada con las Tecnologías de la Información.

Entre esas habilidades se encuentran el liderazgo, debido a que los videojuegos anima a los jugadores a ser más sociales y en estos casos siempre debe haber un líder de grupo que requiere mayores habilidades sociales y de trabajo para lograr el éxito del juego.

Otras habilidades que pueden desarrollarse con los videojuegos es la coordinación de manos y ojos, estimula la agudeza visual y concentración en lo que se hace. Una destreza que ayuda a cualquier profesional en Ingeniería de Sistemas.

Varios estudios afirman que los videojuegos pueden ayudar a la los cambios cognitivos en niños y niñas en relación con la memoria, la retención de datos y destreza en las manos. Así como, aumentar la conectividad funcional y del volumen de materia gris del cerebro.

Entre los juegos que pueden ayudar a afianzar estas habilidades son los que tienen relación con la gestión, donde el jugador debe gestionar recursos para conseguir un fin. La meta de estos juegos es evitar la bancarrota, construir o planificar los recursos de una ciudad. Como por ejemplo el videojuego Sim City que tiene como temática la creación, gestión y evolución de ciudades.

También está Cities: Skylines que permite a la persona vivir las dificultades de la creación y el mantenimiento de una ciudad real, ampliando, al mismo tiempo, algunos de los temas ya conocidos de la experiencia de la construcción de ciudades, con acueducto, transporte, energía y sistema de salud, encarnando al jugador como el alcalde de la metrópoli que ha construido.

Sin embargo, debe tenerse en cuenta que jugar demasiado puede traer complicaciones para la salud. No obstante, su uso moderado ayuda a que las habilidades aumenten y puedan ayudarte a la profesión que tienes o que estás por estudiar.