Lo ideal para cualquier ser humano es dormir a la misma hora todas las noches y de manera profunda. Sin embargo, en la universidad, esta dulce rutina no siempre es posible. Sí. En muchas ocasiones hay que trasnochar, ya sea repasando alguna materia que causa dificultad, para entregar un trabajo a tiempo o para presentar los parciales finales. ¿Cómo hacer entonces para que tanto trasnocho no cobre la factura?

1- Mantener una buena alimentación:

estar bien nutrido. Eso quiere decir que no te saltes ninguna de las tres comidas, tengas pequeñas meriendas y mantengas un balance entre el nivel de proteínas, carbohidratos, vegetales y frutas en tu dieta. Además, procura estar hidratado, tomar varios vasos de agua al día. Esto hará que tu cuerpo aguante mejor la variación en tus rutinas de sueño.

2- Hacer siestas:

dormir unos treinta a cuarenta minutos durante el día es lo ideal para recuperarse un poco. Si bien, esto no hace que recuperes el sueño perdido, sí te ayuda a estar más lúcido y te facilita continuar con las jornadas.

3- Dormir ocho horas al día:

si has tenido que variar tus jornadas de sueño, procura dormir las siete u ochos horas de sueño continuas, así sea que te despiertes más tarde que de costumbre. Ya tendrás tiempo de retomar tus horarios habituales.

4- Volver a la normalidad:

si has tenido que tranochar por unos días o algunas unas semanas, trata de volver cuanto antes a tus hábitos normales de sueño. Trasnochar no debe ser algo de todos los días, sino de solo alguna época, porque en realidad las situaciones lo ameriten.

5- Mesura con el café:

después de tomar una taza de café, su efecto de lucidez tarda durante unas tres a cuatro horas. Es decir que, no es necesario estar tomando cafeína cada hora o menos para mantenerse alerta. Todo lo contrario, puede generar un exceso de adrenalina, lo cual puede ser contraproducente.